En febrero de 2021 Sharon O'Donnell presentó una demanda civil en contra de Nicolo Laurent, CEO de Riot Games. La ex-asistente ejecutiva inició el proceso judicial el 7 de enero del mismo año. La demanda cita abuso sexual, conductas discriminatorias y un despido injusto al reportarlo a las autoridades de la compañía.
Cuando la demanda de O'Donnell sacudió los medios, Riot Games actuó con premura. Primero, negó haberla despedido por reportar las conductas de Nicolo. De hecho, mencionó tener reportes previos, lo que dio paso a un proceso de investigación a cargo de un tercero. Hoy 16 de marzo, un comité especial conformado por la junta directiva recibió los resultados de dicha comisión. Luego de evaluarlos, propuso que Nicolo no debe recibir castigos por los presuntos actos.
El grupo está conformado por Youngme Moon, profesora de la Escuela de Negocios de Hardvard. A ella se le suman dos ejecutivos de nivel alto de Tencent, dueña de Riot Games.
En una carta abierta, el comité elaboró en la decisión tomada. "No es una propuesta que tomemos a la ligera. En casos donde tienen que ver ejecutivos de alto rango, estamos conscientes que las dinámicas de poder suelen dar lugar a acciones y sesgos que pueden afectar tóxicamente la experiencia de otros dentro de la organización. Además, en muchos casos, llegar a una conclusión en este tipo de acusaciones puede ser difícil", inicia la carta.
"Muchos casos de esta índole no son en blanco y negro: a veces caen en la categoría de grises. Dicho lo anterior, este [el de Nicolo] no fue así. En él, simplemente no encontramos evidencias que justificaran una sanción de cualquier tipo en su contra", continuó. De acuerdo con The Washington Post, el CEO de la compañía envió un correo electrónico a los empleados, negando las acusaciones en su contra.
"Es importante que escuchen lo siguiente directamente de mi persona: las acusaciones de acoso, discriminación y represalias sobre mí no son ciertas. Nada de esa índole, o remotamente cercano, ocurrió", asegura Nicolo.
La investigación de Seyfarth Shaw LLP (representada por Gibson, Dunn & Crutcher LLP en este caso) llegó justo a tiempo para Riot. La compañía solicitó una conferencia de estado porque, supuestamente, O'Donnell manipuló testigos para su caso.
El documento fue presentado en la Corte Superior del Estado de California, argumentando presunto acoso, amenazas y manipulación de testigos. De acuerdo con Daily Esports, Riot declara que O'Donnell "ofreció compensación individual por atestiguar a su favor". De igual forma, asegura que "incentivó a otros de presentar una demanda contra Laurent para obtener beneficios".
También hay menciones de información privada de rioters para la prensa y amenazas a testigos. En resumen, Riot asegura que O'Donnell estuvo afectando negativamente el desarrollo de la investigación y demanda. Por esta razón, pidió la conferencia de estado, que tiene como objetivo permitir que el juez guíe los pasos que debe seguir el proceso legal.
Finalmente, pese a tener una propuesta preliminar sobre Nicolo, el comité especial no cierra las puertas a reabrir el caso. Para ello, debe aparecer nuevo material para continuar la investigación.
Al momento de publicar la nota, aún no hay una resolución oficial por parte de la Corte Superior del Estado de California.
A pesar de las múltiples promesas por cambiar la cultura de la compañía, los problemas continúan presentes. Como resultado, Alienware tomó la decisión de terminar prematuramente el patrocinio global.
