En el día de ayer Riot Games confirmó estar investigando las acusaciones de una ex trabajadora de la compañía a su CEO Nicolo Laurent de discriminación sexual y acoso sexual. La que fuera asistenta ejecutiva de Riot Games Sharon O'Donnell realizó una denuncia el pasado mes de enero dirigida al Jefe de Operaciones de la compañía desarrolladora de League of Legends y Valorant, entre otros juegos.
O'Donnell, que cuyo contrato fue terminado por Riot Games en junio de 2020, denuncia fallos en sus retribuciones, gastos médicos y daños de todo tipo ocasionados durante su etapa en la compañía californiana. La denuncia ha sido realizada en las instituciones judiciales del estado de California seguirá su curso mientras se estudian las acusaciones.
Según se recoge en la denuncia, la O'Donnell alega que Laurent le habría hablado en repetidas ocasiones sobre su vestimenta o actos, llegando a decirle que debería ser más femenina, así como afirma que el CEO de Riot llegó a proponer a las mujeres de la empresa "tener hijos para sobrellevar el estrés causado por el COVID". Las acusaciones van hasta actitudes más graves y personales como que en una ocasión le preguntó si quería viajar con él o diciéndole que "que debía correrse en su casa mientras su esposa estaba fuera"; algo a lo que se negó la denunciante.
Tal y como se relata en la denuncia, una vez O'Donnell rechazó las insinuaciones de Laurent, fue castigada en el trabajo, relevada de sus funciones y, eventualmente, despedida. En este sentido, la denunciante también alega que no cobraba las horas extra y que no tenía pausas para comer.
Riot Games ha respondido a esta situación a través de un comunicado: "Es vital para que los rioters confíen en nuestro compromiso para cambiar la cultura es tomar todas las acusaciones de acoso o discriminación muy seriamente, a través de investigaciones y tomando acciones contra cualquiera que haya realizado esas acciones". En dichas declaraciones se afirma que una firma legal de fuera de Riot está estudiando el caso y que Laurent "ha confirmado su total cooperación y apoyo durante el proceso".
Ya en 2018 surgió una extensa pieza en Kotaku en la que se hablaba de la cultura sexista de Riot Games y, aunque hay constancia de que se ha llevado a cabo un proceso interno para cambiar esta situación, en ocasiones surgen polémicas en torno a ciertos trabajadores; eso sí, nunca se había llegado hasta el estamento más alto de la compañía como es el CEO.
Desde Rioters For Change, "un colectivo de trabajadores de Riot Games que abogan por cambios éticos y responsables" en la compañía, se ha declarado que "están con quienes han sufrido abusos en Riot" y que "historicamente, Riot no ha sido una compañía en la que los líderes hayan rendido cuentas".
La denuncia tendrá un período de investigación de un año y, una vez se haya dado con las evidencias, o la ausencia de ellas, se procederá a juzgar el caso.
Consulta aquí la denuncia.
Uno de los aspectos menos agradecidos de League of Legends y que más ajustes necesita: el cliente.
