Una de las premisas que se ha establecido como la única alternativa para subir de rango en League of Legends es la de que para ello solo podemos depender de nosotros mismos. Hay algo de verdad en ella. Sin embargo, se ha interpretado como que los jugadores deben de tomar siempre un papel en el que tirar del carro del equipo de forma directa ejerciendo mucho daño. Sin embargo, nada más lejos de la realidad. Incluso algunos supports han demostrado ser totalmente capaces de mejorar a los tradicionalmente considerados grandes campeones a este respecto.
Faker lo ha demostrado en numerosas ocasiones. Famosa es la semifinal de los Worlds de League of Legends 2017 en los que el jugador fue capaz de ganar la partida para el por entonces SK Telecom jugando cinco veces consecutivas con Galio y sacándole brilló al personaje contra Royal Never Give Up. Pero como sabedor de que las lecciones a veces duran poco, el jugador ha ofrecido un recordatorio en forma de despliegue defensivo en una partida correspondiente a una de sus últimas retransmisiones en directo.
En ella nos muestra, de nuevo con Galio, como es capaz de sacar adelante a su tirador solo a base de movimientos defensivos. Una aportación en la que ayuda con el daño, pero sobre todo con efectos de control sobre unos oponentes que quedan totalmente a merced de todo lo que le echen sus compañeros. Un movimiento que demuestra que la toma de decisiones y la interpretación de las peleas sigue siendo un valor en el juego tan importante como tener las mejores mecánicas.
Aunque ya no ostenta el indiscutible primer puesto del podio en el League of Legends mundial, el jugador encara la madurez de su carrera con filosofía. Ganar ha dejado de ser una costumbre, pero el objetivo siempre será el mismo: levantar su cuarto campeonato mundial y aumentar una historia ya imborrable en el título de Riot Games.
Aunque sea uno de los combos más viejos de League of Legends, la combinación de Ryze y Nunu todavía puede dar un disgusto a los jugadores
