Call of Duty: Modern Warfare ya está agazapado, esperando asaltarnos en su versión final el próximo 25 de octubre en PS4, Xbox One y PC. Sin embargo, durante este mismo fin de semana y el que viene, Activision e Infinity Ward han concedido a buena parte de la audiencia el privilegio de comprobar de primera mano los cambios y añadidos de su vertiente multijugador (todavía tienen que enseñar la campaña y el modo Spec Ops) a través de una serie de fases de beta cerrada y abierta.
Hemos estado jugando a fondo a ella y, aunque los mapas y modos disponibles irán cambiando, sí que nos hemos podido quedar con el feeling del juego, paladeando los grandes cambios que esta nueva iteración del multijugador de Call of Duty presenta. Lo que encontraréis a continuación son los cambios más importantes:
Sin minimapa
Quizás el cambio más importante una vez en la pomada sea que desaparece el minimapa de la esquina superior izquierda. Esto hace que recorrer los mapas sea más complicado si no nos los sabemos, y que los encuentros con los enemigos sean más sorpresivos, con lo que la tensión suele ser mayor cuando recorremos el mapa de juego.
Hay maneras de solucionarlo, como activando el radar personal o un UAV (que activa el minimapa para el usuario y para todo el equipo, respectivamente), pero por defecto nos tenemos que guiar por la brújula de la parte superior de la pantalla, que nos indica la dirección de los disparos enemigos.
También genera ciertas desigualdades, ya que si un equipo coge una racha buena y encadena UAVs tendrá las de ganar, pero eso entra dentro ya del trasiego normal de la partida.
En general, podemos decir que quitar el minimapa cambia casi por completo la forma de jugar a un Call of Duty, y eso no puede ser nunca malo.
Realismo
La intención de Infinity Ward es la de acercar de nuevo a esta serie al realismo, insuflando una dosis extra de pausa y táctica a la frenética acción de la serie. Nos explicamos. Se sigue notando que estamos ante un Call of Duty en el manejo de las armas, pero el peso del personaje se nota al saltar y correr (y además olvidaos de dobles saltos y similares), haciendo que el combate se vuelva mucho más físico. También se nota en la letalidad de las balas, que ha aumentado respecto a anteriores entregas, haciendo que casi cualquier enfrentamiento sea mortal por necesidad. Más tensión que añadir a la propuesta, por si no era ya suficiente.
Hay concesiones, por supuesto. Modern Warfare sigue estando MUY lejos de títulos como Arma, pero sí que es cierto que, con el mando en las manos, se nota diferente.
Armas
El arsenal de Modern Warfare no varía demasiado respecto a lo que podríamos esperar, con los mismos tipos de armas de siempre (fusiles de asalto, subfusiles, rifles de francotirados, metralletas pesadas, etc...). Incluso el número de armas que portamos son las mismas, con una principal y una secundaria, más las granadas letales y secundarias de rigor (a lo vieja escuela de CoD).
Donde todo cambia es a la hora de gestionar la personalización de estas, que va unida a la personalización del propio soldado que llevaremos al campo de batalla. Desaparecen los límites, para poder equipar los accesorios que queramos (y hayamos desbloqueado) en el arma que tenemos. Cada accesorio está unido al arma en concreto que hemos elegido, haciendo que algunas opciones tengan un gran número de accesorios, y otras anden más justas. Sin embargo, podemos equipar hasta 5 accesorios con total libertad, y cada uno tendrá efectos positivos y negativos sobre el propio arma. Es decir, más libertad que nunca para llevar el arma que más nos guste.
Sin clases
En las últimas entregas había clases con equipamiento y habilidades exclusivas. Sin embargo Infinity Ward ha querido eliminar este tipo de barreras, y permitirnos configurar nuestros soldados como nos dé la real gana. Ahora el aspecto de nuestro soldado solo determina eso mismo, cómo nos vemos, dejando total libertad para escoger las opciones de personalización.
Por ejemplo, tenemos una habilidad que se recarga con el tiempo, los típicos perks (que una vez más están de vuelta), el tipo de granadas que llevamos, las armas, las rachas que queremos llevar. Sin restricciones. Esta vez mandamos nosotros.
Rachas
En las últimas entregas de la serie la puntuación que acumulábamos contribuía a permitirnos activar las rachas que llevábamos equipadas. Daba igual que esos puntos vinieran de bajas enemigas o de capturar un punto en una partida de Dominio. Eso se acabó. Vuelven a contar solo las bajas, con lo que las rachas son ahora un bien mucho más preciados.
Esto hará que, quizás, los más expertos lo tengan algo más fácil... Siendo esta además la sensación que nos ha dejado el modo multijugador de Call of Duty: Modern Warfare en general.
En cuanto a las rachas incluidas, no hay demasiadas sorpresas, aunque por la ausencia de minimapa tener un UAV o un Radar Personal equipado se torna básico para que no nos pillen con el culo al aire con frecuencia.
Modos de juego
Call of Duty siempre ha gozado de una amplia variedad de modos de juego. Sin embargo Modern Warfare promete rizar el rizo ampliando el rango de posibles jugadores dentro de cada partida.
- Habrá modos 2 vs 2, como ya comprobamos en la reciente alfa cerrada.
- Habrá modos con equipos tradicionales, con un componente más táctico.
- Los mapas para partidas tradicionales están preparados para combates 10 vs 10, mucho más intensos y frenéticos.
- No tendrá battle royale, pero sí partidas para hasta 100 jugadores, aunque aún no hemos tenido oportunidad de probarlas. En esta partidas se podrán usar vehículos, y será básico el trabajo en equipo. Además, los mapas de este modo son específicos y únicos para este menester.
Sin pase de temporada
Call of Duty: Modern Warfare no tendrá pase de temporada, y las futuras expansiones que irán llegando serán completamente gratuitas. GRAN novedad, largamente esperada. Sin embargo, como contrapartida el juego sí que tendrá micropagos y elementos cosméticos que podremos adquirir con dinero real. Nos prometen que no tendrán incidencia en el juego, pero como siempre, nos mantenemos cautos a este respecto hasta que lo podamos probar.
