Arc System Works hizo un anuncio agridulce para los fanáticos de Guilty Gear. Luego de una fase beta, la desarrolladora leyó los comentarios acerca del sistema de salas. En consecuencia, tomó la difícil decisión de atrasar Guilty Gear -STRIVE- por dos meses..
Inicialmente, la nueva entrega de Guilty Gear estaba agendada para el 9 de abril de 2021. Ahora, tiene fecha de lanzamiento para el 11 de junio. En el comunicado oficial, Arc System Works hizo hincapié en que su prioridad es entregar un buen producto.
“Como resultado de la valiosa retroalimentación obtenida luego de la fase de beta abierta, aprovecharemos esta oportunidad para entregarles el mejor juego posible. Necesitamos tiempo extra para pulir algunos aspectos del juego, tales como las salas en línea y estabilidad de los servidores”, compartió la desarrolladora.
En las redes sociales, usuarios apoyaron la decisión ya que las salas en línea decepcionaron a más de uno. Desde su anuncio, hubo quejas por lo poco práctico que resultaban, además de estar alejado a la temática de Guilty Gear. Sobre los servidores, si bien el juego presume del sistema rollback, hubo algunos problemas de conexión en la fase de beta cerrada. Eventualmente, la experiencia en línea mejoró a tal grado que jugadores profesionales quedaron más que contentos.
Los participantes de la beta abierta rellenaron una encuesta sobre la satisfacción con el juego. A partir de aquí, Arc System Works notó la inconformidad con el confuso sistema de salas en línea.
“Creemos que es mejor usar el tiempo extra para mejorar la calidad del juego y ofrecer una mejor experiencia a los jugadores”, finalizó el comunicado.
Fanáticos esperan que los dos meses de trabajo sirvan para que las salas en línea cumplan con su objetivo: hacer del juego en línea algo rápido y preciso. No tanto un lugar confuso y ajeno a la temática de la franquicia.
Esta no es la primera vez que Guilty Gear -STRIVE- sufre un atraso en su lanzamiento. Debido a la pandemia del coronavirus (COVID-19), tuvo que aplazar su ventana de estreno, pensada para finales de 2020.
Arc System Works parece haber conseguido lo que desde hace mucho tiempo se consideraba imposible, tener una buena conexión en un fighting game.
