Durante el pasado 2020 y este 2021 la tendencia en el mundo del videojuego es el retraso. Todos entendemos que la anomalía que ha sido la pandemia de COVID nos ha impedido llevar a cabo nuestros proyectos en tiempo, y eso incluye los desarrollos de videojuegos. Sin embargo, parece que hay ciertos títulos malditos que son incapaces de terminar su desarrollo de una forma correcta. Hace poco conocimos que Vampire: The Masquerade – Bloodlines 2 cambiaba de estudio de desarrollo y volvía a quedarse sin fecha, pero hoy sabemos que a este grupo de juegos funestos se sumará Dying Light 2.
La secuela del juego zombies y parkour realizada por el estudio polaco Techland era uno de los juegos más esperados por muchos. Aunque aún no tenía fecha de lanzamiento oficial, sí que se había dado por hecho que el juego saldría el pasado año. Más tarde conocimos que sería durante este mismo año 2021 cuando tendríamos novedades sobre el desarrollo. El juego irrumpió con fuerza en la industria, con unas expectativas altísimas y un componente de roleo realmente prometedor.
Una dirección aparentemente negativa
Según se cuenta en el medio The Gamer en un largo reportaje, la dinámica de trabajo en la desarrolladora es de todo menos positiva. A través de las declaraciones de diversos trabajadores del juego se habla de cómo el CEO Pawel Marchewka y su directiva no acepta ideas del equipo y les obliga a usar otras de distintos títulos ya conocidos. También se cierne la sospecha del nepotismo al haberse contratado a su mujer para realizar el diseño de interiores de las nuevas oficinas, aunque Marchewka afirma que ella es una "profesional" y que tienen una "relación profesional en el trabajo". Además de esto, su hermana es la jefa de ventas internacionales.
En el artículo se dicen cosas como que "Techland tiene un historial de firmar a gente con grandes expectativas y que al final se queda en nada" o que "cuando un experto empieza a dar consejos en contra de la directiva, poco a poco le van aislando y quitando responsabilidades". Lo que está claro es que el desarrollo se ha ralentizado y en estos momentos decir una fecha de salida es más que aventurado.
Además de este asunto, Dying Light 2 fue uno de los juegos afectados por el escándalo de Chris Avellone. El que fuera guionista de Fallout New Vegas fue apartado de la industria cuando ya había trabajado en los primeros pasos de títulos como este Dying Light 2. Esto, los múltiples retrasos y el silencio del equipo durante tantos meses no hacían sospechar nada bueno.
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