Los jugadores europeos de League of Legends son habituales en la LCS norteamericana, y este año además hay caras nuevas, como Luka "Perkz" Perković, Andrei "Xerxe" Dragomir y Barney "Alphari" Morris, que llegarán para aumentar la cuota del viejo continente.
Sin embargo ya sean nuevos en la liga o hayan jugado allí durante años, siguen necesitando un visado para trabajar en los Estados Unidos. Mientras las perturbaciones producidas por la pandemia mundial de coronavirus sigue vigentes, parece que las solicitudes están tardando más en procesarse y, por tanto, algunos jugadores se han quedado 'congelados' a la espera.
Santorin, el nuevo fichaje del Team Liquid, fue uno de los que se encontró en esta situación. La buena noticia es que recibió su visado recientemente y ahora debería poder unirse al equipo.
Sin embargo, no se puede decir lo mismo de Broxah. El ex jungla de Fnatic jugará en América del Norte por segundo año y el año pasado tuvo los mismos problemas de visado.
En las redes sociales, no parece muy optimista, creyendo que podría estar quedarse bloqueado en Europa hasta febrero. Si este es el caso, probablemente será reemplazado por Raymond "Griffin" Griffin o Ryan "Keel" Keel por el momento.
CLG también tiene un brote de COVID-19 entre su equipo con el que lidiar. La única buena noticia que ha tenido la organización es que otro de sus jugadores importado de la UE, el finlandés "Finn" Wiestål, no tiene problemas con el visado.
Pese a la creciente profesionalización de League of Legends, los problemas de visado siguen afectando a los jugadores de la LCS y, una vez más, se han cebado con Broxah. El jungler no podrá debutar con CLG, como mínimo, hasta el próximo mes de febrero.
