2020 es un año raro, a todos los niveles, una especie de momento bisagra que aparece a la vez que la nueva generación de consolas. Todos estamos más o menos de acuerdo a día de hoy en que el paso de PS4 a PS5 y de Xbox One a Xbox Series X tiene un punto más “light” para los usuarios, puesto que aún no hemos podido vislumbrar ese grandísimo salto tecnológico o a nivel jugable que a veces significaba la llegada de una nueva videoconsola. Resuenen ahora en vuestros oídos los ecos de aquellos espectaculares E3 en los que Nintendo se la sacaba (hablamos de la Nintendo 64) y dejaba a todos atónitos. O del enorme dinosaurio de la PlayStation.
En esta ocasión, en cambio, hay cierto elemento llevadero, incluso continuista. Algo similar a lo que pasó con Minecraft entre PS3/360 y las recientes PS4 y One: hay juegos que van a seguir empleándose. Y de entre ellos, este día nos vamos a centrar en Fortnite. El Battle Royale de Epic Games ha terminado por, casi literalmente, fulminar el modo “historia” por el que algunos pagaron hace tiempo (o pagamos, para ser sinceros) y que se ha convertido en el patio de recreo de millones de usuarios.
Poco se puede decir de Fortnite que no conozcáis ya: 100 jugadores se enfrentan en una isla, o todos contra todos, o por equipos, cada uno con las skins que ha desbloqueado (sea jugando, sea pagando) y con un buen equilibrio entre usuarios en lo que a habilidades y opciones de triunfar se refiere. Está disponible en casi todas las plataformas, y la cuestión es: ahora que llega la nueva generación, ¿qué nos va a aportar? En cuestión de unas tres semanas concluirá la actual temporada, que ha venido marcada por la inclusión de Los Vengadores en todo su esplendor. Y oye, la nueva temporada, la 5 del capítulo 2, va a aparecer justo después de la aparición en el mercado de Xbox Series X/S y PS5. ¿Qué nos preparan? ¿Se ajustará el juego a las nuevas consolas? Sabemos que será accesible desde las mismas, y es que recordad, va a seguir siendo un título de descarga (y ya el ser o no gratuito dependerá de la suscripción de cada uno).
Lo primero y más evidente: un subidón a nivel visual
Pero ojo, tampoco os vayáis por las nubes aún. Sí, se prepara un modo que subiría hasta los 120 fps estables, o eso dicen (ahora toca verlo en movimiento y recibiendo parches), pero ciertamente un juego como Fortnite podría ser dócil de convertirse en la sede perfecta del estreno de la generación. Ahora el escenario probablemente sea visible desde muchísimo más lejos con detalle, la caída desde el bus sea más espectacular por el nivel que alcanzaremos de renderizado de entornos a nivel que nos acercamos al suelo, las texturas cargarán más rápido y tendrán más detalle…
Sí, lo cierto es que si queremos saber cómo será el futuro (o mejor dicho, presente inmediato) de Fortnite en consolas, tan solo hay que ir a echar un vistazo en los PC más avanzados. No va a ser muy diferente. Pero ¿Y si ahora el escenario cambia y se adapta? Imaginad que el nuevo mapa juega un una liga diferente. Imaginad que se curva, una mezcla entre Origen y Halo, permitiéndonos verlo todo a mayor distancia y con más opciones de movilidad.
¿Nuevos vehículos? ¿Nuevas armas? ¿Nuevos escenarios?
Hablamos de hecho de la inclusión de nuevos vehículos, algo que nuestra nueva consola pueda gestionar, como algunos aéreos más allá de los tan manidos helicópteros. Fortnite podría, incluso, sacar músculo y enseñarnos más ciudades, edificios, entornos urbanos o propios de guerra, siempre mezclados con ese tono socarrón humorístico (no desprovisto de un punto creepy de abandono que hace dudar de su orientación). Olvidaos de Parque Placentero o Pisos Picados (gran referencia al pasado): ahora las consolas podrían meternos en entornos más amplios y con más edificios, incluso de una gran altura, convirtiendo la experiencia en, dentro de lo fantástico, algo incluso más cercano. No nos vamos a plantear que con las nuevas capacidades de procesamiento (eso que tanto se habla de los teraflops, que aún entendiéndolo es algo que un servidor pasa por alto y siempre acaba jugando intensamente al Animal Crossing entre horas) podrían permitir mayor cantidad de jugadores simultáneos, porque realmente pensamos que quitarle el formato actual sería la pérdida de identidad más grave, o al menos de las más preocupantes. No tiene por qué ser así, pero no contamos con ello.
¿Un modo creativo más detallado?
Y no nos equivoquemos: incluso el modo creativo puede darnos un mayor número de opciones, más posibilidades de creación, más elementos y entornos más variados. Un mayor nivel de detalle visual no es lo único que podemos esperar del juego que se ha convertido en algo más que una competición: Fortnite lleva meses rasgando el tejido de la realidad y metiéndose con bailes, llamas y alusiones en el mundo real, apareciendo en bailes de jugadores de fútbol hasta en Vengadores: Endgame. Esperamos mucho, y todo lo que os contamos va más allá del simple subidón de gráficos. Pero ¿Y si sólo ocurre eso? Probablemente seguiríamos jugando, pero recordad que esto es reinventarse o morir.
Sueños anclados a una realidad multiplataforma
Es un misterio qué ocurrirá tras el evento final de la temporada, pero lo que está claro es que marcará una nueva situación, tal vez un nuevo mapa, y algo que podría estar fuertemente influenciado por las nuevas consolas y su gran capacidad. Pero, y ahora esto va para todos los demás (usuarios de PS4, Xbox One y Switch, amén de plataformas móviles), ¿ahora todos nosotros qué?
Poned el juego en Switch, o en cualquier otra plataforma móvil, o simplemente, instaladlo en un ordenador con algunos años de antigüedad: Epic no deja colgados a los usuarios y tendrá actualizaciones y adaptaciones del apartado visual durante bastante tiempo. Y simplemente, veréis un “downgrade” que muy bien podría ser tomado como un “upgrade” visto a la inversa.
Sí, es posible que llegue un momento en el que el juego sólo se actualice en las nuevas plataformas, tanto por utilidad como por razones de tiempo y dinero. Pero mientras tanto, relax. Nos queda Fortnite para rato en las actuales, lo que no quita que nos pique el gusanillo… Quizás la única gran diferencia entre las versiones anteriores y las de nueva generación sea el que posibilita el hardware en sí, sea la consola, o los mandos - y aquí hablamos del Dualsense -, con su vibración más detallada y los gatillos adaptables. Pero soñar es gratis. ¿Y vosotros, esperáis una gran actualización a la altura? ¿Será Fortnite pronto un reclamo para la nueva generación? Se admiten apuestas, que eso le gusta a todo el mundo.
Un duro golpe para los compradores de la nueva generación de consolas: los torneos y competiciones de Fortnite no se podrán jugar en estas nuevas máquinas cuando se lancen.
