Aunque Tyler1 ha sido uno de los streamers más polémicos de la historia de League of Legends, el creador de contenido estadounidense se fue ganando poco a poco un lugar privilegiado en el corazón de los aficionados. Desde sus inicios más tóxicos hasta la actualidad, ha sido capaz de moderar su actitud y hacerse con un nombre respetable.
Fue el primer streamer en contar con un baneo permanente que le impedía hasta retransmitir el juego y tuvieron que pasar años hasta que Riot Games acabara borrando su nombre de una lista negra en la que parecía que solo figuraba él. No es un buen currículum pero gracias a ese notable cambio en su comportamiento y la segunda oportunidad que le brindó Riot, ha tenido la opción de redimirse.
Ahora T1, el club de propiedad Norteamericana en el que milita Faker, se ha hecho con los servicios del streamer. Tyler1 se une al equipo en calidad de contenido en lo que ha resultado ser uno de los movimientos más sorprendentes de todo lo que va de año 2020.
Vistos los acontecimientos de los últimos tiempos, parece que T1 está llevando a cabo un proceso de occidentalización. Aunque la organización no va a deshacerse de su equipo estrella de League of Legends que forma en la LCK coreana y tiene plaza asegurada para el año 2021, parece que está tratando de llevarse también a los aficionados norteamericanos. Todavía no han acabado de dar con la tecla, pero su interesante proyecto en VALORANT y el fichaje de Tyler1 dan buena fe de sus intenciones.
Uno de los proyectos frustrados de Riot Games ha resucitado gracias a la comunidad y el particular rediseño que han hecho del campeón. Aunque todo comenzó con una broma, el fenómeno es tan grande que ya supera a muchos personajes en cuanto a popularidad.
