Microsoft ha oficializado las especificaciones de Xbox Series X y Xbox Series S, sus dos nuevos sistemas de nueva generación. Y en los datos, que podemos ver en la propia web de la empresa, podemos encontrar aspectos curiosos y desconocidos hasta ahora, al no mostrarse en los tráilers promocionales.
El primero de ellos enfocado a la conexión WiFi. Las consolas están equpadas con una antena dual con 802.11ac, lo que viene a ser cercano a las especificaciones del WiFi 5, una versión algo menos sofisticada que el WiFi 6 que ya tienen algunas consolas. Básicamente, tiene la misma conexión que Xbox One S y que PS4 Pro. Puede ser decepcionante que no se haya actualizado a la última versión de la conectividad para una consola de nueva generación tan poderosa.
También se dirime que Xbox Series X y S tienen tres puertos USB 3.1 de Gen 1, algo que también supone una decepción para quienes querían un puerto USB de tipo C. Aun así, el nuevo puerto USB es una versión mejorada del estándar de Xbox One X.
Habrá una pequeña diferencia de velocidad, pero no tendrá demasiada importancia ya que ambas máquinas tendrán un puerto de expansión exclusivo para SSD NVMe. Todavía podremos usar USB estándar para juegos de la generación actual o para hacer una copia de seguridad de los juegos de la próxima generación, aunque estos solo pueden ser jugados con los nuevos SSD, ya sea de forma interna o externa.
Las nuevas Xbox podrán reservarse a partir del 22 de septiembre. Llegarán a las tiendas el 10 de noviembre a 499 euros la Xbox Series X y a 299 Xbox Series S.