Las actualizaciones en Call of Duty: Warzone son más que bienvenidas por la comunidad. El nuevo contenido, los ajustes a las armas y las correcciones de errores hacen del juego una experiencia más completa. Sin embargo, en el último parche Infinity Ward ha metido la pata hasta el fondo haciendo un ajuste que no aparecía en las notas de la versión por ningún lado.
La modificación de poder afecta a la Empuñadura delantera de mercenario. Este accesorio era el que usábamos por costumbre en casi todas nuestras clases y había un buen motivo para ello. Además de las mejoras en la precisión había un aumento de algo más de 3,5 puntos porcentuales en el movimiento, algo que ahora se ha convertido en una penalización del 1%.
El cambio habría pasado desapercibido y no hubiera sido grave de haber aparecido en las notas de la versión. Simplemente habría que haber pasado a un nuevo accesorio o adaptarse a la penalización y seguir adelante. El problema es que las actualizaciones ocultas han sido una costumbre que ya han traído problemas en otros muchos juegos.
La comunidad necesita conocer los detalles del juego y, sobre todo, los ajustes de balance. En Fortnite, por ejemplo, hubo mucha discusión cuando Epic comenzó a trabajar con este tipo de actualizaciones. Emulando esta estrategia, Infinity Ward ha creado un precedente peligroso y que de ninguna manera debería continuar aplicando en su juego estrella.
Viejas Heridas es la nueva misión de Warzone en la que tendremos que recopilar información por todo el mapa de Verdansk para dársela a Ghost, el operador de la Task Force 141 que nos hace hacer de recaderos constantemente.
