Había motivos de sobra para confiar en el lanzamiento de VALORANT. El nuevo FPS de Riot Games consiguió unos números de escándalo a lo largo del periodo de beta cerrada en el que estuvo disponible para los jugadores que lo conseguían a través del sistema de drops de Twitch y el hype era máximo por parte de la comunidad.
Este contexto, acompañado de un confinamiento a escala mundial, se lo puso más fácil al título, pero también marcó una serie de récords difíciles de volver a conseguir. Durante la primera semana de la beta, el juego consiguió 148,7 millones de horas visualizadas, mientras que en el caso del lanzamiento la cifra se reduzca hasta los 18,2 millones.
La falta de grandes streamers jugando a VALORANT ha hecho que se sitúe incluso fuera del top 5. Gente Charlando, LoL, Fortnite, GTA V y Call of Duty son capaces de superar de forma habitual al shooter táctico de Riot en lo que a registros de espectadores simultáneos se refiere.
En cualquier caso, lo nuevo de Riot Games todavía tiene tiempo para volver a coger carrerilla. También habrá que esperar a ver cómo funcionan los torneos competitivos del juego, eventos que por sí solos podrían aupar a VALORANT a las primeras posiciones de Twitch y devolverle al juego esa exposición perdida en las últimas fechas.
Riot Games ha sido capaz de aprobar con nota en un proyecto en el que había más por perder que por ganar, y debuta en la acción en primera persona con una propuesta excelente.
